detectores electroópticos de nivel
Los detectores electro-ópticos disponen de tres elementos en su interior: un emisor de infrarrojos; un prisma en contacto con el fluido; y un receptor de infrarrojos. Este emisor recibe el haz de luz que a través del prisma lo envia al emisor, un haz que con el prisma expuesto al aire refleja una cantidad de luz que cambia considerablemente si el prisma queda sumergido en el fluido, debido a que hay una cantidad de luz que es difracta y no llega al receptor. De tamaño muy reducido y sín partes móviles, estos detectores permiten una repetibilidad excelente en aplicaciones con líquidos límpios y no reflexivos. Resultan ideales en aplicaciones donde el espacio disponible es limitado y pueden haber problemas debidos a vibraciones.
Son utilizados en el control de seguridad de bombas, acumuladores de aceite de lubricación, cárters de motores y cajas de engranajes, y en general en todos aquellos casos en qué se requiere una gran precisión y repetibilidad.